Tipos de uva- Cariñena
La variedad de uva Cariñena es autóctona de Aragón, y concretamente de la región vitícola y D.O. Cariñena. Las fuentes históricas afirman que es originaria de la localidad zaragozana de Cariñena, de la cual toma el nombre. Probablemente, la uva de variedad Cariñena proceda de la hibridación de otras variedades introducidas por comerciantes Fenicios en todo el Mediterráneo Occidental alrededor del siglo IX a.C.
La variedad de uva Cariñena está muy extendida por todo el mundo, de modo que tiene multitud de sinónimos a lo ancho y largo del globo. Prácticamente, uno por cada región productora. En Cataluña es habitual referirse a ella como Samsó y en La Rioja le otorgan el nombre de Mazuelo. En Francia es conocida como Carignan, nombre del que procede el nombre norteamericano de Cariganane y en Italia toma el nombre de Carignano.
Hoy en día, la uva con la que se elabora el vino Cariñena se encuentra extendida por, prácticamente, todas las regiones productoras del planeta. Es muy habitual poder encontrarla en toda la cuenca mediterránea, tanto en Europa, como en Oriente Medio y en el Norte de África. Dada su resistencia a las altas temperaturas y a la escasa humedad, también es común verla en amplias zonas viticultoras de California, del norte de México, Argentina, Chile y también en Sudáfrica y en el sur de Australia.
La uva de variedad Cariñena es una uva de gran vigor, de muy alto y asombroso rendimiento. Los vinos de Cariñena destacan por su elevada acidez y taninos. Son uvas grandes, con un precioso y oscuro color azulado que reside en su hollejo. Éste es grueso y duro, lo que acentúa su resistencia, y el racimo del que nace la Cariñena es de un considerable tamaño.
La vid de Cariñena también se caracteriza por su fragilidad frente a las infecciones propias de la planta. Pero, pese a ello, ha podido arraigar bien allí donde las condiciones ambientales son las idóneas. Requiere un clima cálido y relativamente seco para madurar; es común encontrar viñedos de uva variedad Cariñena sin irrigación más allá de la que provee la propia naturaleza. La vid crece de forma vertical y los brotes que produce crecen cercanos al propio tronco.
En general, el vino de la variedad de uva Cariñena suele tener una brillante coloración y un alto contenido en taninos y azúcar que le confieren su característica astringencia. Los aromas que produce tienen matices amargos y herbáceos, generalmente florales, que recuerdan a las violetas.